Todos sabemos que las hojas de reclamaciones son muy temidas por todos los establecimientos, si alguna vez te ponen una, piensa que ésta te puede ayudar a corregir ciertos puntos que tengas que mejorar en tu local. Pero, ¿qué debo hacer si me ponen una hoja de reclamaciones? ¿cómo debo actuar? ¿supone alguna sanción? Te contamos todo lo que tienes que saber sobre las hojas de reclamaciones en la hostelería.
Las hojas de reclamaciones son documentos oficiales públicos que se ponen a disposición de los clientes cuando éstos quieren presentar a la Administración de Consumo una queja formal acerca de un bien o servicio que hayan adquirido. En España, según la Ley de Defensa de los Consumidores y Usuarios, es obligatorio que todos los establecimientos destinados al sector de la restauración dispongan de hojas de reclamaciones, y además, también será necesaria la colocación un cartel visible que informe que el local dispone de las mismas, ya que el no cumplir con estas obligaciones puede acarrear sanciones de entre 200€ a 5.000€.
Este documento consta de tres hojas diferenciadas por colores, los cuales determinan quién se debe quedar dicha copia.
Estos formatos pueden variar en función de la Comunidad Autónoma en la que se encuentre el establecimiento, te recomendamos que consultes las especificaciones de las tuyas. Puedes consultar aquí todas las normativas que aplican en tu restaurante, bar o cafetería.
Por lo general la hoja de reclamaciones consta de 5 apartados, de los cuales el establecimiento deberá rellenar dos de ellos:
Una vez completada toda la información que se requiere, se deberá firmar por ambas partes y poner el sello del establecimiento.
La administración tiene un plazo de 10 días para dar respuesta a la queja.
Está claro que vivir una situación como esta no debe de ser fácil, por lo que es de vital importancia mantener la calma en todo momento y saber cómo actuar para no agravar la situación.
En algunos casos, se recomienda que atienda al cliente un superior u otro compañero, ya que puede facilitar el entendimiento entre las dos partes y encontrar una solución antes de que te pongan una hoja de reclamaciones.
Pero, ¿y si son recurrentes las hojas de reclamaciones? Está claro que aquí el problema lo tiene el servicio que ofreces, por lo que tendrás que hacer cambios en la manera en la que se trabaja, y utilizar estas quejas para mejorar el bien o el servicio que estás ofreciendo. Probablemente visite el local un inspector del ayuntamiento para comprobar el funcionamiento del negocio.
Como ya hemos dicho anteriormente, es fundamental que estas quejas las usemos para mejorar nuestro servicio y formar a los empleados para conseguir cumplir con las expectativas de nuestros clientes, por eso, te aconsejamos:
Te dejamos aquí un enlace a nuestra Guía TPV en dónde podrás ver de manera desarrollada todas las funciones que tiene un software TPV para ayudarte con la gestión global de tu negocio de hostelería.